Nos encontramos en la década de la llamada ‘web semántica’, un paso más allá de la ‘web participativa’, en la que el usuario jugaba el papel más importante y en la que los buscadores van a dar prioridad a aquellas webs que ofrezcan mejor contenido.
“El crecimiento en Internet se incrementa de tal manera que Google busca nuevas formas de organizar la red. Queda atrás el sólo tener buenos títulos, descripciones y palabras clave (keywords). Ahora se trata de ofrecer el mejor contenido”.
El nivel de exigencia del usuario de Internet es cada vez mayor y tiene perfectamente claro que es lo que espera encontrar al llegar a su empresa, tras realizar búsquedas de acuerdo a los términos que entiende relacionados con ella.
Por tanto, antes de poner en marcha su portal en Internet debe plantearse los siguientes aspectos en profundidad. Nuestra experiencia le ayudará a plasmarlo de la mejor manera posible:
- ¿Qué quiere que sepa el usuario que llega a su web?
- ¿Cómo quiere transmitirle su filosofía a ese cliente potencial?
- ¿Con qué palabras clave le van a buscar?
- ¿Qué otros términos están relacionados con mi empresa?
La nueva web semántica entiende estructuras gramaticales y valora el uso de un buen sistema de categorías y archivos a los que acceder de la forma más sencilla y sin perder el orden.
Una óptima categorización y archivo de sus páginas así como una correcta estructura de enlaces internos, es el complemento perfecto a este contenido, haciéndose imprescindible para las empresas ponerse en manos de profesionales si quieren competir en los buscadores.